Hasta que el viento pare

En mis manos y en tus ojos,
en tu guitarra y en mi voz,
con vos hasta que el viento pare y amanezcan las noches con vos,
hasta que el viento pare y se acallen mis demonios,
y se oculten los fantasmas,
y amanezcan los días con vos...

Desde alguna noche hasta alguna madrugada,
desde Buenos Aires hasta acá,
desde el fastidio hasta la inmensa alegría de vernos llegar,
permanecimos y permaneciendo,
haciendo que amanezcan noches, y lluevan soles,
hasta que el viento pare,
y se congelen los infiernos,
y se oculten los fantasmas,
amaneciendo,
anocheciendo,
hasta que el viento pare...

En mis manos y en tus acordes,
en tu mirada mi reflejo,
en los olvidos, las distancias y esas pensa hechas mares,
hasta que el viento pare
y las lágrimas sean dulces,
hasta que el tiempo calle
y las noches sean claras,
con vos;
en mis manos y en tus brazos,
aunque haya que pelear y cueste mantener el paso,
con vos,
aquí,
hasta que el viento pare...