martes, 3 de junio de 2008

Aferrarme a esto

Todo lo que veo, todo lo que soy,
en alguna melodía,
alguna rima o alguna canción...

Un suspiro en la oscuridad,
un silencio en medio de tanto ruido,
un espacio para soñar y volver a creer,
no hay nada que perder después de tanta soledad...

Debo aferrarme a esto,
es todo lo que tengo,
porque es todo lo que hay,
canta en una plegaria mi suspiro de libertad...

Porque no queda tiempo,
porque no quedará lugar donde no vaya este viento a soplar,
fuerte como el sol de primavera,
fuerte como un grito de desesperación,
fuerte como la pasión que cada uno lleva dentro,
late este loco corazón,
y escribe entre mil palabras,
elegiendo casi al azar los versos,
aferrándose a esto,
aferrándome a vos...

Lo que tenemos,
lo que somos y lo que podremos ser,
en un suspiro,
late lo que fuimos,
en un acorde suena lo que somos,
aferrándome a esto,
en una nueva canción...

Porque solo sé que el tiempo llueve y las distancias se destruyen,
porque solo sé que todo cambia pero algunas cosas permanecen,
porque si el sol aún brilla habrá alguna otra esperanza,
y seré siempre alguna otra ilusión...

Late en el suspiro de lo que he sido esta poesía sin estilo,
late en lo que de pena queda en mi alma,
algún viejo dolor,
y porque aún sé que nada cambia esto,
porque te tengo, porque nos tenemos,
porque conozco el dolor y se está desvaneciendo,
debo aferrarme a esto aferrándome a vos...

Lo que queda entre los silencios,
lo que queda entre las calles, y cada paso que caminamos,
lo que queda entre esas noches, y estas madrugadas,
más que recuerdos son verdades,
más que sueños son realidades,
mas que pensamientos son sensaciones,
todo lo que puede llegar a ser o caer son restos de soledades,
girones de penas sin lugar pero con huellas,
profundas rimas de silencios,
poesías sin vanidades,
sueña mi sueño,
vive mi realidad,
canta mi canción esta poesía,
que aprende a repetir
debo aferrarme a esto...
Nunca dejes escapar al amor escuche decir a la moraleja de una pena,
nunca dejes ir lo que te cura, porque lo que te hace bien a veces es un espejismo,
pero lo que te salva nunca te abandona,
suena en una rima, es una campana,
suena y resuena casi sin pausa,
y es toda mi esperanza,
toda mi espera, toda mi alma,
suena en un suspiro entre viejos fantasmas de cuentos sin hadas ni duendes,
ni coros, ni cielos, ni mundos maravillosos,
suena en la realidad de cada día como la vida que vive en cada esquina,
suena como sonó alguna vez esa plegaria,
debo aferrarme a esto,
suena y resuena sin tiempo y sin distancia...

No hay comentarios:

Datos personales